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Derechos humanos

En Grupo TEPSA estamos comprometidos con el respeto de los derechos humanos fundamentales de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.

 

Reconocemos que todas las personas nacemos libres e iguales en dignidad y derechos, en nuestros procesos no hacemos distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole, estado civil, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición, todos tenemos derecho a un trabajo digno, justo y remunerado, que nos otorgue calidad de vida, seguridad y libertad.

 

Respetamos la libertad de pensamiento, opinión y expresión, motivamos la sana convivencia con actividades, espacios de descanso y entrenamientos, que nos permitan fortalecer nuestras relaciones humanas, respetando el derecho a la no participación. Fomentando un equilibrio entre trabajo y familia, tiempo de vacaciones, descansos saludables, maternidad y paternidad responsable, protección al medio ambiente que nos rodea y cuidado personal.

 

Apoyamos a nuestros empleados en la participación ciudadana, artísticas, deportivas y voluntariado.

 

Nuestros procesos nos permiten comunicar efectivamente cuando una persona no tenga las condiciones de trabajo saludables, equitativas y satisfactorias, protegiendo su bienestar y su integridad como persona y colaborador.

 

Con nuestras campañas apoyamos la educación, el entrenamiento y la formación para generar personal más capacitado que cuente con las herramientas de vivir una experiencia laboral más gratificante.

 

Todos somos iguales ante la ley, nos comprometemos a cumplir con los derechos publicados en los documentos oficiales como constitución y los documentos que de ella deriven.

 

Durante el desarrollo de nuestras relaciones comerciales solicitamos el soporte de nuestros socios comerciales para fomentar y llevar a cabo procesos que permitan respetar y mantener los derechos humanos con su personal, buscamos crear una red de mejora continua que permita una mejor comunicación y respeto en nuestras relaciones.

 

Reprobamos prácticas de esclavitud, trata de personas, trabajo infantil, acoso, discriminación, torturas o tratos crueles, o degradantes.

 

Nos apegamos a las obligaciones que todas las personas tenemos por ser integrantes de nuestra comunidad, puesto que solo en ella podemos desarrollarnos libre y plenamente. Apoyamos los procedimientos que permiten satisfacer las justas exigencias de la moral del orden público y del bienestar general en la sociedad democrática donde vivimos.

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